Tengo prediabetes. ¿Y ahora qué?
Escrito por: Eugenia Araiza, Nutrióloga, Educadora en Diabetes
4 minutos de lectura
febrero 11, 2018
Entre un sentimiento de alivio y algunas preocupaciones, te encuentras tratando de entender qué significa todo esto. Habías escuchado sobre la diabetes, pero no sobre la prediabetes. Y te preguntas: "¿Entonces tengo diabetes o no? ¿Qué debo hacer? ¿Qué significa esto?"
Quizás hayas sentido que algo anda mal con tu cuerpo o hayas notado manchas oscuras en tu cuello, axilas, rodillas o codos. Tal vez en un chequeo de rutina, tu médico notó que tus niveles de glucosa en sangre eran más altos de lo normal y te hizo preguntarte si tenías diabetes. En cambio, tu médico dijo que tienes prediabetes . Es un alivio tener la respuesta a por qué has estado teniendo esas experiencias, pero es posible que te preguntes: tengo prediabetes, ¿qué significa eso y qué hago?
¿Qué es la prediabetes?
La prediabetes indica que su nivel de glucosa en sangre es ligeramente superior al normal, pero no lo suficientemente alto como para ser considerada diabetes tipo 2. La prediabetes es una señal de alerta que indica que algo no está funcionando correctamente en la forma en que metaboliza la glucosa. Pero si realiza ciertos cambios en sus hábitos y estilo de vida, puede prevenir o retrasar la progresión a diabetes tipo 2.
Piense en su páncreas como una “esponja”
Como educadora en diabetes , suelo utilizar una esponja llena de agua como ejemplo para mostrar cómo el páncreas produce insulina. En este ejemplo, la esponja representa el páncreas y el agua representa la insulina. Todos nacemos con la esponja para evitar que nos falte agua, pero cuando tenemos una dieta compuesta principalmente por alimentos procesados con un alto contenido de grasas, sodio y azúcar refinado, apretamos la esponja un poco más de lo habitual y reducimos la cantidad de agua que contiene.
Si a esto le sumamos factores como el sedentarismo, el estrés y no comer suficientes frutas y verduras que nos aportan muchos nutrientes, entonces llega el día en que la esponja tiene muy poca agua. Estos factores provocan resistencia a la insulina, que explico más adelante.
Resistencia a la insulina
La resistencia a la insulina se produce cuando las células musculares, grasas y hepáticas no responden bien a la insulina. Imagine que sus células son una cerradura y la insulina es una llave. La llave está ligeramente torcida y no puede abrir la cerradura para que la glucosa en sangre pueda entrar en la célula. Debido a que las células no pueden absorber fácilmente la glucosa de la sangre, el páncreas produce más insulina. Si bien el páncreas puede producir suficiente insulina para superar la débil respuesta que tienen las células a la insulina, los niveles de glucosa en sangre se mantendrán en un nivel adecuado. Pero si no puede producir suficiente, comenzará a ver una cierta elevación de la glucosa en sangre que indica que algo no está bien.
Ahora bien, ¿cómo supo el médico que tenía prediabetes? Las pruebas que mencioné antes probablemente incluían algunas de las siguientes:
- Prueba de hemoglobina glucosilada (A1c). Esta prueba nos indica cuál fue el promedio de glucosa en sangre durante los últimos tres meses.
- Prueba de azúcar en sangre en ayunas. Se toma una muestra de sangre después de un ayuno de ocho horas.
- Prueba de tolerancia a la glucosa oral. Se toma una muestra de sangre después de un ayuno de ocho horas, se bebe una solución azucarada y se mide la glucemia dos horas después.
Hemoglobina glucosilada (A1C) | Glucemia en ayunas | Prueba de tolerancia a la glucosa | |
Rango normal | 5.7 % | <5,5 mmol/L 100 mg/dL | <7,8 mmol/L 140 mg/dL |
Prediabetes | 5,7-6,4 % | 5,5-6,9 mmol/L 100-125 mg/dL | 7,8-11,1 mmol/L 140-199 mg/dL |
Diabetes | >6.5 % | >6,9 mmol/L 125 mg/dL | >11,1 mmol/L 200 mg/dL |
Tienes prediabetes, ¿y ahora qué?
Bueno, ya sabemos que la prediabetes es un estado en el que se encuentra antes de padecer diabetes, pero después de su diagnóstico, usted tiene mucho control sobre los factores que pueden evitar que progrese a diabetes tipo 2. Una de las claves es evaluar su entorno, sus hábitos alimenticios y sus hábitos de ejercicio. El Programa Nacional de Prevención de la Diabetes se centra en estos dos últimos. Al mantener una dieta saludable baja en alimentos procesados y compuesta principalmente por frutas, verduras, carnes magras y mariscos, legumbres y más, junto con ejercicio diario de hasta 150 minutos por semana, puede prevenir o retrasar la aparición de la diabetes tipo 2 y hacer que sus niveles de glucosa en sangre vuelvan a la normalidad.
Sin embargo, si aún así le diagnosticaron diabetes tipo 2, puede seguir utilizando esos mismos hábitos para mantener niveles saludables de glucosa en sangre y vivir una vida plena y saludable con diabetes. No hay nada de qué avergonzarse por vivir con diabetes tipo 2 o prediabetes.

Autor
Eugenia Araiza, Nutrióloga, Educadora en Diabetes
Eugenia es Nutrióloga y Educadora en Diabetes. Ella vive con diabetes Tipo 1 desde 1995. En 2019, comenzó Healthy Diabetes, un proyecto que incluye recursos educativos para apoyar y empoderar a las personas que viven con diabetes. Es autora del libro “Soy diferente y me gusta” que aborda el tema de la aceptación cuando se vive con Diabetes.
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